Seth Godin (tengo la sensación de que últimamente Anotado se está convirtiendo en una glosa de su blog) trata de poner las cosas en contexto y dice que hay que asumir que cualquier cosa nueva que hagas acabará disgustando al menos al 2% de tus clientes.
Y dice que ante eso sólo tienes dos opciones: dejar de hacer cosas nuevas, o asumirlo y centrarse en satisfacer a la inmensa mayoría que supone el otro 98%.
Creo no obstante que se queda corto, que le falta el paso final. Creo que hay una tercera opción, que es lograr que eso nuevo que hagas apasione tanto al 98% que sean ellos mismos los que den la cara por ti ante ese 2% de descontentos.
Fácil decirlo, como siempre.
¿No?
Me sumo al blog de Seth, no te preocupes, no estás solo.
Añades que ese 98% dé la cara por tí (en el buen sentido, se entende). Eso ya existe y lo han conseguido muy pocos (véase el fenómeno fanboy-Apple-Steve Jobs). Sin embargo dejar de ser cliente y convertirse en un evangelista no sé yo si es bueno. Personalmente creo que los evangelismos llevan al radicalismo. Creo que las críticas de ese 2% son también necesarias. Te recuerdan que quizás en tu próximo producto o servicio podrás conseguir que cambien de idea.
Aripaco
Paco:
Completamente de acuerdo.
La crítica es necesaria para mejorar y definir lo que quieres que sea tu producto.
Cuando hablo de que den la cara por ti, no me refiero tanto al fenómeno fanboy, que implica algo irracional (como "ser" de un equipo de fútbol), sino al del cliente satisfecho que te apoya frente a las críticas.
Y, como dices, es factible, como prueban algunos casos que hay por ahí. Fâcil no, factible sí.