Desde el punto de vista legal, hay 10 puntos que debes tener en cuenta cuando actúas bajo los efectos de una falsa percepción de Internet:
- Para la red, tú eres un número que puede cambiar en cada sesión. Una dirección IP fija o dinámica que suministra mucha información. En especial, perfiles de conducta y contenidos.
- Estos contenidos quedan albergados en un ordenador que está identificado con otra dirección IP.
- Esta dirección IP pertenece siempre a alguien que esta sujeto a una leyes, aunque el servidor no lo esté.
- Si buscas un servidor extranjero para eludir las leyes de tu país, es posible que eso sea utilizado en el futuro como prueba de tu mala fe.
- Si buscas un servidor que no borre tus contenidos ilícitos cuando sea requerido para ello, olvídalo.
- Si el «arrendatario» de esta IP no borra los contenidos ilícitos para eludir su responsabilidad, es posible que el «propietario» le obligue a hacerlo para no convertirse él en responsable.
- Todas las direcciones IP están sujetas un rango jerárquico. Forman una pirámide en la que cada estrato está unido al superior mediante un contrato en el que se compromete a cumplir la ley y a no albergar contenidos ilícitos.
- El afectado por un contenido ilícito solo tiene que acudir al nivel adecuado en la cadena jerárquica.
- El componente territorial es absolutamente irrelevante. No hay paraísos informáticos.
- Si subes contenidos ilícitos a la red y no los borran es simplemente porque el que tendría que preocuparse de ello está entretenido en conseguir leyes inútiles, basadas en la creencia de que Internet existe.
Interesante, muy interesante las reflexiones de Xavier Ribas sobre aspectos jurídicos de Internet.
En mi opinión se resumen en dos:
- En Internet todo queda grabado
- Está sujeto a las leyes existentes, no hacen falta leyes nuevas.
