Es ineludible que aceptemos la magnitud de los cambios que las tecnologías disruptivas están produciendo.
La transformación de las ciudades en «ciudades inteligentes es algo que está sucediendo ante nuestros ojos y que no podemos negar. Cocles eléctricos, autónomos y conectados irán lenta pero gradualmente reemplazando los vehículos a los que estamos acostumbrados. Ya estamos viendo los primeros drones de reparto…
En gran parte de las ciudades estamos ha viendo nuevas soluciones de movilidad que complementan o, a veces, reemplazan las tradicionales.