Sí, malo de verdad.
Al menos en lo que al periodismo se refiere.
Acabo de ver esta noticia en El País (aquí por si han cambiado la versión corrigiendo las barbaridades).
Y lo terrible no es la noticia en sí, sino lo que hay detrás de la noticia.
Alguien ha entrado en Internet, ha obtenido una información determinada de un medio que no cita y que no es la fuente original (que en este caso sería el National Hurricane Center del National Weather Service de los EE.UU.) y la ha traducido parcialmente (¡se ha dejado hasta frases en el idioma original de la noticia!).
Y no contento con eso, lo ha traducido mal, ya que ha fusionado la información de Bertha, tormenta que no tiene ninguna probabilidad de afectar al Caribe, con la de una nueva tormenta en formación que a día de hoy aún no tiene nombre y que, esta sí, es posible que afecte al Caribe si evoluciona como se espera que lo haga.
Lo más grave es que lo ha mandado a publicar y no hay ningún filtro entre ese mal recolector de información y su publicación en un medio de prestigio como El País.
¿Cuánta de la información que manejamos a diario sufre de los mismos defectos de absoluta falta de rigor y verificación de fuentes?
¿Cuántas decisiones que afectan a nuestras economías, a nuestros negocios, a nuestras vidas, tomamos todos los días apoyados en este tipo de información?
¿Es este un mal que sólo afecta al periodismo? Recordemos que se habla de El País, un medio que se puede tomar como referencia de información de calidad (¿o no?).
¿Afectará también a otro tipo de profesionales?
Tenemos toda la información del mundo más cerca de lo que nunca nadie pudo imaginar, pero esto no quiere decir que sea fácil llegar a ella.
Actualización 15/7/2008 18:00 (GMT -5):
Ayer después del post utilicé la opción de corregir errores de El País para avisar de la barbaridad Esta mañana lo habían corregido (quitando las frases en inglés), pero manteniendo el error de fusionar dos fenómenos.
Esta mañana he vuelto a avisar del error, lo han vuelto a corregir, …, y ¡ahora es peor! En la primera parte de la noticia informan correctamente de la trayectoria estimada, pero en la segunda vuelven a decir que va hacia el Caribe.
Creo que me rindo.
Y me reafirmo: qué cerca está la información y qué difícil es llegar a ella.
Nota: actualización desde la BlackBerry.